by Ernesto Piedras
La Inteligencia Artificial (IA) es una de las aplicaciones tecnológicas transformadoras más llamativas del siglo en curso.
Desde automatización de procesos hasta asistentes personales inteligentes, la IA está reinventando la forma en que vivimos y trabajamos. Sin embargo, en México, esta revolución parece seguir un ritmo de adopción menor al esperado.
A pesar de que más de la mitad de los internautas mexicanos (54.9%) dice conocer la IA, apenas 18.6% la usa activamente.
¿Qué factores están frenando su adopción?
Brecha Generacional en Adopción. El conocimiento y uso de la IA varía drásticamente entre los diferentes grupos de edad.
Mientras que los adultos jóvenes (entre 26 y 40 años) son los más familiarizados, con 72% con conocimientos acerca de la IA, sólo 43% de los mayores de 50 años ha oído hablar de ella, y los menores de 21 años tampoco registran un nivel superior en este rubro (53%).
Pero el conocimiento no se traduce directamente en uso. Aunque los de 26 a 30 años son los que más saben de IA, solo 15% la usa realmente. En contraste, los menores de 21 años y quienes tienen entre 31 y 40 años la utilizan más (22%), a pesar de tener menor o igual conocimiento.
En tanto, las personas mayores a 50 años registran un nivel de uso de 9% entre el total. Ello evidencia que existe una brecha generacional en torno al uso de la IA en México.
¿Por qué no usamos la IA? Hay varios factores que podrían explicar este bajo nivel de adopción. Primero, la falta de comprensión profunda: sólo una cuarta parte de los internautas afirma entender bien cómo funciona la IA.
Al respecto, 51% tiene una comprensión “algo clara” y casi un 24% admite no entenderla en absoluto. Este es un caso más en el que el desconocimiento del funcionamiento tecnológico genera desconfianza.
Segundo, la percepción de utilidad. Aunque la IA está presente en múltiples aspectos de la vida diaria (recomendaciones de películas, filtros en redes sociales, asistentes virtuales), no todos la reconocen como tal. Una razón de 42% de los usuarios considera que la IA está “poco” o “nada” presente en su vida. Esto habla de falta de conciencia de su uso.
Tercero, el temor a los riesgos. El robo de identidad, uno de los principales peligros asociados a la IA, es reconocido por 72.4% de los usuarios. Sin embargo, esta conciencia también varía con la edad: 57.6% de los menores de 21 años reconoce estos riesgos, frente a 78.1% de los mayores de 50 años. Paradójicamente, los más jóvenes usan más la IA, pero están menos conscientes de sus peligros.
¿Cómo Cerrar la Brecha de Aprovechamiento de la IA? Si México quiere aprovechar el potencial transformador de la IA, necesita más que contar con conectividad: necesita educación y desarrollo de habilidades digitales.
Incluir contenidos de alfabetización digital e IA en los planes de estudio, desde la educación básica hasta la universidad, es menester. También hace falta una estrategia nacional de concientización sobre los beneficios y riesgos de la IA, enfocada en distintos grupos de edad.
Por su parte, las empresas deben fomentar prácticas éticas y transparentes en el uso de IA, y el gobierno debe diseñar políticas públicas que impulsen una innovación responsable y regulen adecuadamente el uso de datos personales y algoritmos.
La IA en México registra un nivel de adopción incipiente. Su potencial es enorme, pero su adopción real se enfrenta a obstáculos de comprensión, confianza y educación. Solo con una estrategia articulada entre gobierno, empresas y sociedad civil, podremos garantizar que esta tecnología beneficie a todos por igual.