ICC México subraya la necesidad de impulsar una estrategia nacional que impulse infraestructura, innovación y diversificación de mercados para aprovechar plenamente el T-MEC y responder a los desafíos estructurales del entorno internacional
Ciudad de México, a 8 de abril de 2025
La reciente decisión del gobierno de Estados Unidos de imponer aranceles a productos provenientes de más de 180 países ha reconfigurado el entorno del comercio global, mientras en este contexto de tensiones comerciales, México se mantiene como un socio estratégico para Estados Unidos, beneficiándose del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Sin embargo, en la International Chamber of Commerce México (ICC México) consideramos que esta ventaja, aunque relevante, no es garantía de futuro y para consolidar su posición en el nuevo orden comercial global, México debe adoptar medidas estratégicas que fortalezcan su infraestructura, promuevan la innovación y desarrollen capacidades tecnológicas que lo hagan más resiliente y competitivo en el largo plazo.
Desde 2018, Estados Unidos ha adoptado una política comercial más proteccionista, afectando sectores clave como el acero, aluminio, tecnología y agroindustria. México, gracias al T-MEC, ha logrado mantener un acceso privilegiado al mercado estadounidense, lo cual se ha traducido en:
• Convertirse en el principal socio comercial de EEUU. en 2023, con exportaciones por más de 460 mil millones de dólares.
• Ser uno de los principales destinos del fenómeno de nearshoring, atrayendo inversiones extranjeras que buscan producir más cerca del mercado norteamericano.
• Proteger sectores clave como el automotriz y el manufacturero frente a barreras arancelarias aplicadas a otros países.
Aun así, sectores como el acero y el aluminio han enfrentado restricciones parciales, evidenciando que México no está exento de los riesgos globales.
Para capitalizar esta coyuntura y no perder terreno frente a otros países como India o Vietnam, México necesita enfrentar desafíos estructurales en unidad entre el gobierno y el sector privado, que, de no atenderse, podrían limitar seriamente su crecimiento:
1. Infraestructura logística y energética
o Las limitaciones en transporte, conectividad y energía asequible afectan la eficiencia y competitividad del país ante el nearshoring.
2. Dependencia del mercado estadounidense
o Más del 80% de las exportaciones mexicanas van a EEUU, lo que representa un riesgo ante posibles revisiones del T-MEC en 2026 u otros cambios geopolíticos.
3. Inversión en ciencia, tecnología e innovación
o El futuro del comercio global estará determinado por la capacidad de los países para desarrollar y aplicar tecnologías de vanguardia. México necesita invertir decididamente en investigación, talento y digitalización para no quedar rezagado en las cadenas de valor.
4. Entorno global incierto y competitivo
o La competencia por atraer inversión extranjera se intensifica. Solo aquellos países que ofrezcan certeza jurídica, seguridad y políticas públicas eficientes lograrán consolidarse como plataformas exportadoras.
Desde ICC México hacemos un llamado a los sectores público y privado para construir, juntos, una agenda de competitividad basada en:
• Diversificación de mercados: Ampliar la presencia de México en Europa, Asia y América Latina es esencial para reducir riesgos y aprovechar nuevos nichos de oportunidad.
• Desarrollo de infraestructura estratégica: Invertir en carreteras, puertos, ferrocarriles, y acceso energético confiable es clave para facilitar la integración productiva.
• Impulso a la ciencia y tecnología: La innovación no es opcional. México debe construir un ecosistema robusto que fomente la investigación, la adopción tecnológica y la capacitación especializada.
• Fortalecimiento del Estado de derecho y el entorno regulatorio: La confianza de los inversionistas requiere estabilidad, claridad y condiciones que faciliten hacer negocios.
• Diálogo permanente con Estados Unidos: Un vínculo basado en confianza, cooperación y visión estratégica permitirá prevenir conflictos comerciales y reforzar las condiciones del T-MEC.
En un momento histórico de transformaciones globales, desde la International Chamber of Commerce México reafirmamos nuestra vocación como "mercaderes de la paz". El comercio, bien gestionado, es una herramienta poderosa para construir puentes, reducir tensiones y generar prosperidad compartida.
Creemos que México tiene todo el potencial para ser una potencia exportadora basada en innovación, sostenibilidad y valor agregado. Pero lograrlo demanda de colaboración y una visión de país en unidad, que nos ayude a superar los desafíos globales. .