|
|
Durante años, la industria de telefonía móvil en México ha operado bajo una neblina estadística, producto de la incertidumbre y por momentos incapacidad del regulador para estandarizar los criterios de la métrica para la medición entre los distintos operadores.
No ha sido sino hasta el relativamente reciente auge de los Operadores Móviles Virtuales (OMV), que han surgido presiones por un sistema con ciertas métricas que, se argumenta, sean homogéneas o comparables entre trimestres, al menos a nivel nacional, no necesariamente siguiendo prácticas o usos internacionales.
Así, el 15 de diciembre de 2023, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) lanzó una consulta pública para recabar la opinión de operadores, industria y academia respecto a los lineamientos que deberían regir.
La conclusión fue clara a su decir: la métrica más adecuada y alineada con el número de líneas con tráfico saliente en los últimos 90 días. Esto, para evitar comparativos “injustos”, como el que se da entre AT&T, que da de baja una línea tras 90 días[1] de inactividad, y Telcel, que espera hasta 365 días[2] para hacerlo, generando así una distorsión significativa en los indicadores.
Esta falta de uniformidad también afecta métricas clave como el CHURN (tasa de desconexión), ya que un operador con ventanas de desconexión más amplias puede mostrar números artificialmente favorables a sus inversionistas.
Ante esto, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), próximo a su extinción, en su Reporte de Datos Oportunos del lunes 7 de julio, optó por presentar las cifras que los operadores entregaron con base en líneas con tráfico de voz entrante y saliente, así como los que cursaron datos en los últimos 90 días.
De haberse adoptado un criterio realmente uniforme, en donde la métrica más importante la dictaminara el tráfico saliente y no entrante, el número de líneas activas en México pasaría de 155.6 millones reportados por los operadores en el primer trimestre del año, a un estimado de 120.9 millones, es decir, una reducción del 22.3%, lo que revelaría el verdadero tamaño del mercado. Esto toda vez que, al recibir un SMS de promociones, los operadores pueden dar el equivalente a “respiración artificial” a una línea que está en desuso.
Telcel, el operador con más líneas en el país, declaró en sus reportes a la bolsa tener 84.0 millones de líneas en el primer trimestre del año en curso, 1T25, al utilizar el criterio poco usual de 365 días. Además, mantiene líneas activas cuatro veces más tiempo que AT&T, ocultando información clave a sus inversionistas.
Al IFT reportó 81.3 millones con tráfico de datos, lo que no muestra cambios al número reportado el trimestre anterior (81.0 millones), cuando el criterio de 90 días no era requerido. Al estimar las líneas con tráfico saliente en los últimos tres meses que deberían ser reportadas , el número estimado debería aproximarse a 72.1 millones de líneas.
Movistar, que omite en sus reportes públicos el número de líneas en México, declaró ante el IFT tener 21.1 millones. La empresa deja de contabilizar a un usuario cuando han transcurrido 180 días desde que tuvo actividad en su red, y cuenta tráfico de entrada y salida por lo que contabiliza un gran número de líneas inactivas.[3] Por tal motivo, al considerar el corte a 90 días con tráfico de datos, el número de líneas reportadas al IFT disminuye a 10.8 millones.
AT&T, único operador en México que deja de contabilizar una línea como activa cuando han transcurrido 90 días de inactividad, porque ajusta sus parámetros a los estándares que existen en Estados Unidos, reportó 23.6 millones de líneas totales a la Bolsa y 23.2 millones a IFT. La diferencia puede ser explicada por las líneas de reventa que no son declaradas al regulador.
BAIT, que ha emergido como el cuarto operador con mayor presencia en el país, reportó 19.8 millones de líneas activa a la Bolsa. Este operador desconecta a un usuario cuando han transcurrido 180 días de inactividad en la red del operador mayorista.[4] No obstante, al aplicar el criterio de 90 días con tráfico de datos su base sería de 10.1 millones.
En general, todos los operadores muestran números muy diferentes al evaluar distintos criterios.
En este escenario, Telcel lidera en la estimación de líneas no reportadas adecuadamente con los nuevos criterios, con un diferencial de por lo menos 11.9 millones. Esto genera una distorsión grave en el mercado y en la percepción de su desempeño operativo.
Ahora bien, el hecho de que los operadores reporten a la Bolsa números que no coinciden con las métricas observas recientemente en el reporte de datos oportunos del IFT, no quiere decir que estén incurriendo en un delito, toda vez que los criterios en ambos reportes son diferentes. Sin embargo, en ello recaía la relevancia de los nuevos lineamientos para el acervo de IFT.
En resumen, el IFT desaprovechó su última oportunidad para brindar transparencia al sector. Ante la falta de evaluación de los datos, resaltan errores visibles, como 1.6 millones de líneas reportadas por Megamóvil, cuando en su reporte a Bolsa mencionan solamente 576 mil.
Además, históricamente, ha permitido que el agente económico preponderante actúe bajo criterios a modo, sin apego al rigor técnico. Sí, una vez más.
El Instituto aún cuenta con 65 días para rectificar el reporte del pasado 7 de julio, pero si no lo hace, será otra muestra de las oportunidades que dejó pasar el regular que pudo, pero no quiso ser.
De persistir esta omisión, la recién creada Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones tendrá una misión urgente: dar certeza al mercado, garantizar que los operadores cumplan con sus obligaciones y limpiar las estadísticas de artificios.
Con procesos más rigurosos y verificables, los operadores ya no podrán inflar cifras, ni ocultar líneas inactivas.
Finalmente, sabremos cuántas líneas activas existen realmente en México.
La iniciativa de extinción del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la implementación de un modelo en el que sus atribuciones quedarían en manos del Ejecutivo Federal podría resultar en una regresión institucional que colocaría al sector no sólo antes de la Reforma Constitucional de 2013, sino antes de 1996, época en la que prevalecía una estructura de mercado de monopolio privado y sin un órgano con atribuciones para regular la competencia en el mercado de telecomunicaciones en México.
Recientemente, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) llevó al cabo una Consulta Pública sobre el “Anteproyecto de Acuerdo por el que se emiten los Lineamientos para integrar el Acervo Estadístico”, con el objetivo de robustecer la base de datos que recopila, analiza y publica, a partir de información reportada por los operadores.
Los diversos agentes que participan en el sector de telecomunicaciones en México (consumidores, operadores, analistas, academia, inversionistas, instituciones gubernamentales, organismos internacionales, entre otros) requieren información primaria (datos) que cumpla con los principios de ser metodológicamente robusta, oportuna, comparable y replicable en el tiempo.
Hoy más que siempre constituye un insumo esencial para desarrollar análisis estratégicos y proceder a tomar decisiones óptimas de consumo, inversión, regulatorias, comerciales y de política pública.
Al respecto, una fuente de información primaria es y debe ser el IFT.
Para su labor de promoción y regulación de la competencia es esencial que el IFT cuente con información metodológicamente robusta, comparable, replicable en el tiempo, precisa y actualizada, sobre el sector, así como para desarrollar estrategias para promover el desarrollo eficiente de las telecomunicaciones en México.
Requerimientos de Información en los Lineamientos
Con base en los requerimientos de información que incluye el Anteproyecto de Lineamientos para integrar su Acervo Estadístico (Lineamientos, en adelante), se identifica un grado de mayor de detalle de información que los operadores deberán entregar al Instituto, susceptible de liberarse y ser publicada por parte de este último.
Ello, definitivamente abonaría positivamente a la integración de un Acervo Estadístico más robusto.
El apremio que apuntan los Lineamientos de entrega de la información trimestral (dentro de los 20 días hábiles posteriores a cada periodo) haría que su publicación también fuera oportuna, puesto que actualmente, toma entre seis y nueve meses, lo que resulta caduco para la realización de análisis de mercado puntuales.
Otra de las posibilidades que facilitarían los Lineamientos sería publicar la información correspondiente a la contabilidad de suscripciones que se cuentan bajo las diferentes paquetes de contratación (single, doble, triple, cuádruple hasta séptuple play), modalidades (personal, residencial o empresarial), esquemas de pago (prepago, pospago y pospago abierto), las tecnologías de acceso (cobre, coaxial, fibra, satelital, fijo inalámbrico, microondas, 2G-5G, etc.), así como las velocidades de descarga ofrecidas y efectivas de los datos contratadas.
Inconsistencias en la Información Publicada por el IFT
En múltiples ocasiones, The Competitive Intelligence Unit (The CIU) ha identificado a lo largo del tiempo incongruencias de la información reportada directamente por los operadores a sus inversionistas y aquella publicada por el IFT, no existiendo justificación alguna para esta discrepancia.
Efectivamente, no debería haber diferencia al tratarse de información sensible que está sujeta a escrutinio de las autoridades financieras y bursátiles, no solo en México, sino también a nivel internacional.
Se espera que con los Lineamientos la información reportada por los operadores a sus inversionistas coincida puntualmente con aquella disponible y publicada por el Instituto vía el Banco de Información de Telecomunicaciones (BIT) o en su defecto refiera a que se deben las diferencias que, como se ilustró anteriormente, no resultan ser menores.
Adicionalmente, es fundamental destacar otro aspecto de gran relevancia. Existe una variabilidad significativa en las métricas empleadas por los distintos operadores para contabilizar a sus usuarios móviles. Mientras algunos operadores cesan de contabilizar a los usuarios activos que no han realizado llamadas en un lapso de noventa días, otros mantienen “vivas” sus líneas contabilizadas hasta por un periodo de un año.
Esta disparidad reduce la coherencia y comparabilidad entre las bases de usuarios. Por ende, es recomendable que la autoridad regulatoria implemente una metodología estandarizada para la contabilización metodológicamente homogénea de las líneas móviles activas, con base en el indicador inequívoco que es el registro del tráfico efectivo de constante de voz y, sobre todo, de datos.
Recomendaciones en Materia de Información Sectorial
En el espíritu de los señalamientos referidos y con base en los Lineamientos sujetos a consulta pública, The CIU recomienda al Instituto se tomen en cuenta las siguientes recomendaciones puntuales, cuyo objetivo consiste en mejorar la oportunidad, verosimilitud, consistencia y confiabilidad de la información sectorial analizada y publicada por parte del Instituto.
De manera puntual, se exhorta a que los Lineamientos consideren incluir:
Todo ello, abonará a la definición de Lineamientos que contribuyan a contar con información esencial para desarrollar análisis estratégicos y proceder a tomar decisiones óptimas de consumo, inversión, regulatorias, comerciales y de política pública.
En semanas previas, el Instituto Federal de Telecomunicaciones dio a conocer su “Reporte de Información Comparable de Planes y Tarifas de Servicios de Telecomunicaciones Fijas (doble y triple play) 2023” (bit.ly/3Swa1Xl) en el que da cuenta de las condiciones de la oferta empaquetada de servicios de internet fijo, telefonía fija y/o televisión de paga. Ello con el fin de que los usuarios puedan tomar mejores decisiones al momento de contratar estos.
En términos generales, el IFT encontró que se ofrecen más y mejores ofertas de servicios de telecomunicaciones fijas, con más planes y canastas más abundantes de servicios fijos, especialmente en términos de velocidad de banda ancha fija y número de canales incluidos.
Destacan los esfuerzos de inversión en despliegue de infraestructura, fortalecimiento de la huella de cobertura y robustecimiento de la oferta de los operadores cableros, así como las crecientes capacidades y oferta empaquetada con servicios satelitales como es el caso de la oferta conjunta de Sky y Blue Telecomm.
Oferta de Doble Play. En el caso de la oferta de internet y telefonía fijos, destaca un aumento significativo en la velocidad de bajada, tal que 72% de los planes analizados (50) se encuentran en un rango mayor a los 50 Mbps (Megabits por segundo), en 2022 la proporción era de 55%, lo que implica un alza de 17 puntos porcentuales (pp) en tan solo un año.
Adicionalmente, en esta denominada ‘guerra del streaming’, diversos jugadores se han aliado con los operadores para ofrecer de manera empaquetada sus plataformas con servicios de telecomunicaciones, tal que 42% de los paquetes incluyen alguna de estas alternativas de consumo de contenidos audiovisuales por suscripción. Ello ha resultado en economías significativas para los usuarios que desean acceder a estas plataformas a un menor costo.
Mientras que, en la oferta de internet fijo y TV de paga, también ha aumentado la velocidad ofrecida, tal que 73% de los paquetes (11) se encentran en el rango de 10 – 50 Mbps, en 2022 la razón era de 56%. Por el número de canales incluidos, también se observa una mejora, tal que 45% incluyen más de 100 canales, un incremento de 34 pp en su comparativo anual.
Triple Play. Para estos paquetes (66), casi tres cuartas partes (74%) cuentan con velocidades de descarga superiores a los 50 Mbps, 10 pp más que el año anterior. Mientras que, por el número de canales, 67% ofrecen entre 50 – 100, un incremento de 21 pp en su comparativo anual.
En el caso de estos empaquetamientos, la oferta complementaria con plataformas de streaming es mayor, tal que 65% habilitan la posibilidad de generar ahorros por su contratación conjunta con servicios de telecomunicaciones fijas.
Destaca izzi como el operador con un mayor número de plataformas y acuerdos de facturación empaquetada de jugadores de streaming en sus planes ofrecidos. Ello apunta al fortalecimiento de su oferta, fidelidad y atracción de suscriptores, mediante la generación de ahorros para los usuarios, tanto de telecomunicaciones como de plataformas de contenidos audiovisuales por internet.
El reporte y monitoreo constante del IFT de los planes, tarifas, velocidades contratadas y número de canales y plataformas incluidas en los empaquetamientos de doble y triple play funge como herramienta para el empoderamiento de las decisiones del consumidor, que busca la mejor oferta que se ajuste a su presupuesto, demanda de velocidad y preferencias de consumo de contenidos.
La legisladora del PVEM también destacó la importancia de contar con políticas públicas enfocadas al tema de la infraestructura con la que se procesan millones de datos.
Alejandra Lagunes encabezó la mesa de trabajo sobre “Infraestructura y datos”, que se llevó a cabo en el Senado de la República con la colaboración de la Alianza Nacional de Inteligencia Artificial.
En ese encuentro, María Elena Estavillo Flores, excomisionada del Instituto Federal de Telecomunicaciones dijo que es necesario tener una estrategia digital enfocada al uso de las nuevas tecnologías, tanto en el gobierno como en el país.
Agregó que en México se trabaja en una política nacional de datos abiertos, pero se encuentra en una etapa inicial y tiene que evolucionar para su aplicabilidad a los desafíos de la inteligencia artificial.
“Los datos abiertos serán un elemento fundamental para la democratización de la inteligencia artificial”, enfatizó.
Además, mencionó que en el tema de infraestructura la parte presupuestal es fundamental, ya que se requiere de inversiones, pues “cualquier esfuerzo regulatorio y de política pública necesita estar acompañada de recursos, para desplegar cobertura, equipar a las personas e instituciones y crear las condiciones económicas para desarrollar la inteligencia artificial que el país necesita”.
Adrián Alcalá Méndez, comisionado del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, consideró que es importante impulsar la creación de marcos normativos regulatorios que permitan definir de manera mucho más certera los principios éticos, procedimientos para la recopilación y almacenamiento de datos abiertos, además de salvaguardar la privacidad y la seguridad de los datos personales.
Las perspectivas de los operadores de telecomunicaciones sobre el desarrollo sectorial son elementos esenciales para la construcción de las estrategias de política pública y regulatoria que impulsen el crecimiento de la industria en México.
Precisamente, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) realizó su "Tercera Encuesta sobre las Expectativas de los Mercados de Telecomunicaciones en México" (bit.ly/3rljrdq), con el objetivo de recabar las expectativas de expertos y empresas de telecomunicaciones sobre el panorama futuro del sector.
Panorama General de los Operadores. Al respecto, destacan las expectativas mayoritariamente positivas en torno al crecimiento sectorial. Es así que 72% afirman que mejorará el acceso a infraestructura, 92% que se intensificará el uso de los servicios de telecomunicaciones, 6 de cada 10 que las habilidades de los usuarios aumentarán y 52% consideran que los precios, calidad y diversidad de ofertas se mantendrán.
Entre los temas prioritarios para el desarrollo de la economía digital, lidera el despliegue de redes de nueva generación (5G, Fibra óptica, etc.), seguido de la cobertura de los servicios. Algunas posiciones más abajo, se encuentran la competencia en los mercados de telecomunicaciones, asignatura por de más pendiente y la liberación y asignación de espectro radioeléctrico, materia que se ha aplazado indefinidamente.
Los retos identificados por los encuestados con mayor valoración son la generación de ingresos, el ejercicio de inversiones, la atracción de suscripciones, la disponibilidad de espectro y nuevamente se menciona, la esquiva competencia.
Otros retos relevantes consisten en las aplicaciones de espectro de uso libre, la flexibilidad en materia regulatoria, la concentración de mercado, el acceso a infraestructura pasiva, la política del gobierno federal, el vandalismo contra las redes de telecomunicaciones y las iniciativas regulatorias para fibra óptica.
Expectativas de Crecimiento. En este apartado, los operadores estiman un crecimiento anual entre 1% y 4.99% por el número de accesos y/o líneas para los servicios de telecomunicaciones durante 2023, excepto para la telefonía fija que se encuentra en el rango de una caída de (-)0.99% o un ligero incremento de 0.99%.
Esto sería atribuible al “aumento en el uso de los smartphones, al incremento en la frecuencia y tiempo destinado a actividades en línea, además de una mayor cantidad y diversidad de competidores”, en el caso de los servicios móviles. Mientras que para los fijos, “se han incrementado el número de ofertas para contratar los servicios empaquetados (triple play), inclusive los operadores han comenzado a incluir servicios de OTT de pago dentro de sus ofertas comerciales”.
Lecciones para el Regulador. Al consultar a los participantes de la encuesta sobre las áreas de oportunidad sectorial, se le dio una mayor ponderación a la mejora de la política regulatoria, enseguida al despliegue y compartición de infraestructura, a la política de competencia y a la generación de incentivos para la inversión.
Otras asignaturas relevantes para el desarrollo futuro sectorial son la digitalización, el cierre de la brecha digital y la reducción de costos de los servicios para los usuarios finales.
Todo ello, constituye lecciones para el órgano regulador de cara a la definición de su nueva revisión a la política de regulación asimétrica de preponderancia, así como a la elaboración de su Plan Anual de Trabajo para 2024.
La inclusión, enfoque e instrumentación de mejoras y ajustes a la política regulatoria a los señalamientos y perspectivas de los operadores es fundamental para impulsar el desarrollo sectorial en el mediano y largo plazos. De ahí, la relevancia de contar con esta encuesta, como brújula para la definición e implementación de medidas regulatorias eficaces.
El creciente acceso a la telefonía e internet fijos suma 50.7 millones de suscripciones al segundo trimestre de 2023 (2T-2023), 5.5% más que un año atrás.
• Al 2T-2023, se contabilizaron 26.0 millones de conexiones de banda ancha fija (BAF), un crecimiento anual de 5.1%. En el caso de la telefonía fija (TF), se alcanzaron 24.7 millones de líneas, un incremento anual de 5.9%.
|
|
|
|