Ignacio Aceves, presentó Caín

Por Héctor Medina Varalta

 El sonido de pasos suaves que procuraban esconderse de su vista, pero a la vez, que pretendían llamar su atención, se escuchó al final del pasillo, delicado y suave, pero vibrando en aquel silencio, luego el jadeo de una respiración, que poco a poco se fue convirtiendo en un gemido muy similar a una risa apagada, después el breve silencio, dejando que se escuchara la gota de agua que cae contra un lavabo; enseguida, más cerca, de nuevo la risa y el silencio- escribe Aceves.  

Retomando la maldición

Ignacio Aceves, autor de este interesante libro menciona que hace tiempo tenía reflexiones acerca del fenómeno de posesión demoniaca y que la intención de un exorcista es saber el nombre del demonio, pero no necesariamente. El nombre del demonio no protege al exorcista, es solo una manera de invocarlo. En Caín se retoma la historia de una maldición que tiene mucho que ver con el nombre; el nombre es el que define, es el que traspasa, es el que nos deja la maldición viva y acabando con el alma de la gente constantemente. Por otra parte, Ignacio Aceves aclaró que dicho personaje no es el Caín bíblico, sino que la parte importante es el por qué de esta maldición, en este momento tiene ese nombre.

Género del terror

Caín por antonomasia, es el personaje que siempre a sido el traidor, el usurpador, el malo, el que traicionó a los suyos. Entonces, por eso, en la novela, cobra importancia el nombre de Caín, porque es alguien que con tal de escapar de la maldición, traicionó. Al autor le tomó seis meses escribir el libro y lo puede leer cualquier persona de 18 años en adelante, pues es un libro que no se mantiene lineal, pues va evolucionando, va cambiando, sobre todo, está más bien enfocado a quienes le gusta el género del terror, quienes quieran sentir que el libro es peligroso, que el libro les inspira miedo como tal. Además, el libro consta aproximadamente de 40 capítulos.

Una historia de fantasmas

Ignacio Aceves, empezó a escribir cuento corto, hizo una antología que son historias de drama cuyo título es Eterno invierno; un melodrama de vampiros, que se llama Faremont, Pueblo solo; después le gustó abordar el tema del fenómeno zombie, en el libro Tres días, pero desde otra perspectiva, más concreta, más real, más viva; luego escribió una historia de fantasmas, titulada Cerca, muy cerca, luego una historia de hombres lobos, Voces de la noche, en seguida pasamos a Caín. Después hizo una compilación de sus obras de teatro, Penumbra. De hecho, esta última estuvo montada tres años en el Studio Diana, posteriormente le publicaron otros libros y uno más que está en preparación.  

¡Netflix!, ¿por qué no?

Ignacio Aceves, le gustaría que sus historias fueran llevadas a la pantalla, ojalá y Netflix leyera uno de sus libros y se interesara en firmar un contrato como lo ha hecho con otros autores. Por último, nuestro entrevistado añadió: “que a la gente le guste dos cosas: leer y que lean cuentos de terror. En lo particular, considero que el género de terror es el más difícil de abordar; abordarlo bien, es muy difícil. Por eso necesitamos que la gente confíe en el autor, que le dé la oportunidad al autor y que se encuentre con estas historias.”