La banda estadounidense Guns and Roses demostró la noche del pasado viernes en la capital tapatía que más allá de las anécdotas, siguen siendo ésa digna banda capaz de permanecer en el trono de los grupos de rock de estadio. Su show que adquirió un carácter épico, tanto por la enorme producción nunca antes vista en Guadalajara, como por un set list cuidado, hizo de ésta, la noche rockera más celebrada del año en cuanto a conciertos se refiere en esta ciudad descontando festivales. Desde semanas antes, ya la gente aguardaba eufórica y expectante el arribo de la fecha de esta banda liderada por Slash, Duff y Axl, quienes junto a sus compañeros (incluyendo a Dizzy Reed) se entregaron como en los buenos tiempos, aquellos en los que cimbraron el mundo, no en balde el hard rock mundial les debe tanto a ellos.
Así el público que abarrotó el Monumental Estadio Jalisco fué arropado con el concierto del año, cimbrando el recinto hasta sus cimientos apenas al sonar el primer tema “It’s So Easy”, que hizo que a más de uno le brotaran lágrimas de emoción, luego de ver a los tres miembros originales de la banda reunidos después de más un cuarto de siglo y dar un repaso por su historia a lo largo de tres horas de concierto en el que sonaron todos sus grandes éxitos como “Welcome to the Jungle”, “Knocking on the heavens door” (de Bob Dylan) “Don´t Cry”, o Sweet Child O' Mine".
La inclusión de Melissa Reese como ayuda vocal de Axl, fue un acierto pues su voz aunada a la del frontman hacen una mezcla explosiva que le da mucha fuerza a las interpretaciones de cada tema, sonando únicas y contundentes. El público gozó a estas alturas de “Mr. Brownstone", "Rocket Queen" o "Nightrain" del GNR de los 80's o "Coma" del "Use Your Ilussion". Incluyeron temas como “This I Love” o “Better” del polémico disco “Chinese Democracy”; “Attitude” (original de los Misfits), maravillosamente interpretada por el bajista Duff McKagan a las voces (como en su disco de covers " The Spaggethi Incident?"), parte de “Wish You Were Here” (de Pink Floyd) como introducción a “November Rain”, o la sorprendente “Slither” de Velvet Revolver, perfectamente interpretada por Axl Rose. Ilusionaron a su público tocando canciones como "Live and let die", de Paul McCartney y " You could be Mine", del soundtrack de Terminator 2
Axl se encuentra como cantante en uno de sus mejores momentos renaciendo cual áve fénix. Y no solo él. Los actuales Guns N’ Roses viven una nueva era dorada y un gran momento profesional y gracias a eso el público tapatío pudo disfrutar de una increíble sesión de hard rock, con un espectáculo perfectamente preparado y estudiado, donde cada integrante sabía cuál era su papel. Al final, concluirían con “The Seeker” y “Paradise City”, que señalaban un cierre espectacular. Mención especial para los temas “Estranged”, “Double Talkin’ Jive”, toda una sorpresa con una gran acogida del público. La emoción llegó al clímax cuando Axl se dignó a acercarse a Slash y Duff, quienes tomados de la mano saludaban al público, lo cual por los antecedentes es realmente emocionante.
Al finalizar, la empresa productora señaló que asistieron 43,000 personas y se reportó saldo blanco, gracias a la coordinación que tuvieron meses atrás con las autoridades, gracias a las acciones coordinadas por parte del gobierno y dependencias como la Secretaría de Seguridad Pública, Protección Civil y Vialidad que apoyaron en todo momento. Desgraciadamente, una hora antes de que la banda comenzara a tocar, llegó un tumulto de gente a los ingresos del estadio irrumpiendo en las filas que ya estaban hechas pretendiendo entrar con boletos falsos y otro tanto intentando llevar a cabo un portazo, provocando que de momento se detuviera el ingreso y se cerraran momentáneamente las puertas para salvaguardar la seguridad de los asistentes, lo que causó que algunos de los organizadores que llegaron provocando esto fueran detenidos en algunos casos y disueltos todos los participantes, aunque eso si, provocando el retraso al ingreso al concierto, como Iván Lazcano, guitarrista de Rocket Knife y Murria Habat, fan de hueso colorado del Guns & Roses, que mas allá de disfrutar el show -no obstante incompleto-, y quedarse con ganas de escuchar Locomotive o su preferida My Michelle, tuvo que esperar a entrar, por lo que no pudo disfrutar de este gran concierto desde el inicio. No obstante, la banda señaló haber estado feliz de ver un estadio desbordado en esta noche épica.
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