Actualmente: Con el incremento de dispositivos electrónicos y el uso intensivo de electricidad, los niveles de exposición han aumentado. Aunque todavía se mantienen generalmente dentro de límites seguros establecidos por normativas, se ha registrado un mayor número de fuentes de emisión en los hogares y espacios públicos.
“En la vida diaria, una persona puede generar una considerable cantidad de contaminación electromagnética debido al uso constante de dispositivos como teléfonos móviles, routers y repetidores inalámbricos y audífonos inalámbricos. Estos aparatos emiten campos electromagnéticos (CEM) que, aunque generalmente están dentro de los límites seguros, contribuyen a una exposición acumulativa”, indica Jorge Barrera de TES America.
Además, el especialista de TES America señala que con la proliferación de redes Wi-Fi y Bluetooth, junto con el uso intensivo de dispositivos electrónicos, incrementa la presencia de radiación no ionizante en nuestros entornos cotidianos, subrayando la importancia de monitorear y gestionar esta exposición para minimizar potenciales riesgos a la salud.
En este sentido TES America se ha dedicado a evaluar y monitorear los niveles de campos electromagnéticos (CEM) para garantizar la seguridad y el bienestar de las personas. Con su Distintivo Espacio Seguro, certifican que los lugares cumplan con los límites de exposición permitidos, protegiendo la salud humana. Su objetivo es que las personas vivan y se muevan en espacios libres de contaminación electromagnética, promoviendo entornos más seguros y saludables.
Se estima que la contaminación electromagnética podría agravarse significativamente en los próximos 5 a 10 años debido al continuo avance y adopción de nuevas tecnologías. El despliegue de redes 5G y la eventual introducción de 6G, junto con el crecimiento del Internet de las Cosas (IoT) y la expansión de dispositivos inteligentes, incrementarán significativamente la cantidad de campos electromagnéticos a los que estamos expuestos. |