- Los plazos para pagar pueden representar un financiamiento muy alto, señala la senadora Beltrones Sánchez.
Para apoyar a la población que por la actual crisis ha sido afectada en su economía, la senadora Sylvana Beltrones Sánchez, del PRI, propuso realizar adiciones a la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), para que en la declaración anual de las personas físicas se pueda realizar la deducción total de los intereses devengados por créditos de nómina y de adquisición de bienes de consumo duradero.
De acuerdo con un estudio de 2016, elaborado por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), el 56 por ciento del total de las ventas o compras de los mexicanos se realiza mediante el crédito al consumo, el cual permite diferir a meses el pago de las compras y pagar con intereses a una tasa predeterminada y, en ocasiones, variable, refirió la legisladora.
Entre los bienes de consumo duradero y servicios de mayor precio que se pueden adquirir de esa manera, apunó, se encuentran televisiones, estufas, computadoras, refrigeradores, ropa, calzado, autos, reparaciones del hogar o del automóvil, o viajes, entre otros.
La senadora priista indicó que las facilidades que otorgan este tipo de créditos han hecho que la práctica vaya en aumento, al funcionar como un satisfactor para quienes no tienen una capacidad económica que les permita adquirir un bien o servicio y cubrir la totalidad del bien en el presente.
Recordó que en el mes de marzo de 2020, existía una cartera vigente de crédito al consumo de mil 49 miles de millones de pesos, de los cuales 258.8 miles de millones eran por contratos de crédito de nómina.
A decir de Beltrones Sánchez, el crédito de nómina es una opción de financiamiento que ofrecen, hoy en día, tanto bancos como las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (SOFOMES) a los empleados asalariados que reciben el pago de su sueldo a través de nómina, por lo que, la institución financiera en la que tiene su cuenta le puede otorgar un crédito.
Los plazos para pagar estos créditos pueden estar entre los seis y los 60 meses, tiempo que puede ser una ventaja al ser montos pequeños y accesibles, pero que a largo plazo representan un costo de financiamiento muy alto, apuntó.
La iniciativa fue turnada directamente a la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados.