La FDA y la FTC emiten cartas de advertencia a compañías por vender productos alimenticios con Delta-8 THC que imitan papas fritas, dulces y bocadillos de marcas nacionales populares
Las advertencias de hoy forman parte del esfuerzo conjunto en curso de la FDA y la FTC para tomar medidas contra las compañías que venden imitaciones de productos alimenticios ilegales que contienen Delta-8 THC. En junio de 2023, las dos agencias trabajaron juntas para advertir a otras seis compañías por vender productos alimenticios comestibles que contenían Delta-8 THC en envases que podrían confundirse fácilmente con alimentos vendidos por marcas nacionales populares. Las seis compañías ya no tienen esos productos en almacenamiento.
“El etiquetado inadecuado o confuso puede llevar a que los niños o adultos desprevenidos consuman productos con un gran parecido a los bocadillos y dulces populares que contienen Delta-8 THC sin darse cuenta”, dijo la Dra. Namandjé Bumpus, comisionada adjunta principal de la FDA. “Dado que la ingestión accidental o el consumo excesivo de productos que contienen Delta-8 THC podrían representar riesgos considerables para la salud, las compañías que venden estos productos ilegales están demostrando una completa desconsideración a la seguridad del consumidor. La FDA continuará trabajando para salvaguardar la salud y la seguridad de los consumidores de los Estados Unidos mediante el monitoreo del mercado y la adopción de medidas cuando las compañías vendan productos que representan una amenaza para la salud pública”.
En junio de 2022, la FDA advirtió a los consumidores sobre la ingestión accidental de productos alimenticios que contienen Delta-8 THC por parte de niños. Desde el 1 de enero de 2021 hasta el 31 de diciembre de 2023, la FDA recibió más de 300 reportes de eventos adversos que involucraron a niños y adultos que consumieron productos que contienen Delta-8 THC. Casi la mitad de estos informes involucraron hospitalización o visitas a la sala de urgencias y aproximadamente dos tercios de estos eventos adversos fueron a causa de la ingestión de productos alimenticios que contenían Delta-8 THC, como dulces o brownies. Los eventos adversos incluyeron, entre otros, alucinaciones, vómitos, temblores, ansiedad, mareos, confusión y pérdida del conocimiento.
Las imitaciones de productos alimenticios que contienen Delta-8 THC son particularmente preocupantes para la FDA, ya que son extremadamente fáciles de comprar y, a menudo, están disponibles para los jóvenes. La FDA también está preocupada por los procesos utilizados para sintetizar Delta-8 THC, ya que las impurezas o variaciones en el proceso de composición pueden dar lugar a productos que pueden ser dañinos o tener efectos impredecibles en los consumidores.
Además, los envases que son casi indistinguibles de muchos bocadillos populares pueden ser confusos para los consumidores. Varias de las compañías advertidas hoy venden ilegalmente imitaciones de productos alimenticios que contienen Delta-8 THC, incluidas papas fritas, galletas, gomitas u otros bocadillos que imitan marcas de bocadillos conocidas mediante el uso de nombres de marcas, logotipos o imágenes similares en los envases que los consumidores, especialmente los niños, pueden confundir con los alimentos tradicionales. Véanse a continuación:
Hippy Mood “Trips Ahoy!”
Earthy Hemps “Slushers”
Mary Jane’s Bakery Co. LLC “Infused Sour Slizzles”
Life Leaf Medical CBD Center “Double Stuff Stoneo”
GrowGod LLC “Flamin Hot Cheetos”
“Las compañías que comercializan y venden productos comestibles con THC que se confunden fácilmente con bocadillos y dulces no solo están actuando ilegalmente, sino que también están poniendo en riesgo la salud de los niños pequeños”, dijo Samuel Levine, director de la Oficina de Protección al Consumidor de la FTC. “Aquellos que priorizan las ganancias por encima de la seguridad de los niños corren un grave riesgo de enfrentar acciones legales”.
La FDA anima a los proveedores de atención médica y a los consumidores a notificar a la agencia cualquier reacción adversa asociada a los productos regulados por la FDA mediante MedWatch o el Portal de Notificación de Seguridad.
La FDA ha solicitado respuestas por escrito a las compañías en un plazo de 15 días hábiles indicando cómo abordarán estas infracciones y evitarán que se repitan. Si no se abordan las infracciones con prontitud, se pueden emprender acciones legales, incluida la incautación del producto o una orden de restricción.