Header Ads Widget

Llama Ricardo Monreal a debatir en Parlamento Abierto una ley para regulación de la marihuana

*  Hay voluntad polĆ­tica para concretar una legislación que regule su consumo.
  • Se trata de arrebatarle al narcotrĆ”fico el control de este proceso distributivo, subrayó.

En el Senado de la República hay voluntad política de sus integrantes para concretar una legislación que legalice el consumo de marihuana, aseguró el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Ávila.

Al inaugurar el foro “Regulación de la Marihuana”, explicó que existe una iniciativa que contiene diversas disposiciones sobre una “Ley General para la Regulación y Control de Cannabis. Consideró que las propuestas de este tipo deben ser debatidas en Parlamento Abierto, a efecto de establecer con seriedad y precisión el alcance de una medida de esta naturaleza, expresó.

Dijo que con la regulación se podrÔ establecer una política sensata, equilibrada y segura, que garantice el respeto y protección del derecho al libre desarrollo de la personalidad.

Se trata, subrayó, de arrebatarle al narcotrÔfico el control de este proceso distributivo, que en la actualidad se realiza en una atmósfera irremediablemente violenta, corrupta, sin control de calidad, ni gravÔmenes fiscales y en una situación de riesgo para el consumidor.

Monreal Ávila destacó que la regulación implica reglamentar las condiciones en que se produce y se vende la droga, así como ofrecer información sobre su contenido, normar y vigilar el proceso productivo, la cosecha, cultivo, manufacturación, embalaje, para que el producto cumpla controles de calidad y no daños ecológicos.


La legalización, indicó, obligarÔ al Estado a supervisar, regular todo el proceso productivo y comercial de una o varias drogas. AdemÔs, sacarÔ al consumidor de los tenebrosos espacios donde se realiza la venta ilegal.

Su legalización permitirÔ que el Gobierno pueda ahorrar considerables cantidades de dinero destinadas a la guerra contra las drogas. Se informarÔ sobre los efectos de consumirlas; los abusos de su uso; apoyarÔ en la rehabilitación. De igual forma, servirÔ también para proteger a los menores de edad, que dejarÔn de ser asediados por vendedores ilegales.

SeƱaló que MĆ©xico es uno de los paĆ­ses que ha llevado hasta las Ćŗltimas consecuencias la prohibición, “lo que se ha traducido en un intenso nĆŗmero de muertos, desaparecidos, desplazados y violaciones categóricas a los derechos humanos”.

Refirió que segĆŗn la Encuesta Nacional del Consumo de Drogas Alcohol y Tabaco 2017, la marihuana es la droga ilegal que mĆ”s consume la población, tendencia que ha ido a la alza en los Ćŗltimos aƱos. “Esto revela la falta de Ć©xito de las medidas prohibicionistas ante la realidad”.

El prohibicionismo, argumentó, es un discurso irracional y contradictorio, fundado en estados de Ônimo viscerales, en actos derivados de pÔnico y a esto hay que añadir los usos políticos y económicos de las autoridades renuentes a la regulación.

Es un gran avance que, finalmente, hoy estemos discutiendo este tema tabú. No podía presentarse, nunca, en una institución, congreso o parlamento. Es conveniente discutirlo, deliberarlo y en todo caso escuchar todas las voces de la sociedad, puntualizó.

En tanto, el senador Miguel Ángel Navarro Quintero, presidente de la Comisión de Salud, recordó que se han hecho esfuerzos legislativos en materia de la utilización del cannabis para uso médico o procesos de investigación. Sin embargo, no ha tenido claridad ni la prontitud que la sociedad demanda.

Refirió que la Suprema Corte de Justicia de la Nación concluyó que la prohibición constituye un obstÔculo jurídico que impide ejercer el derecho a decidir qué tipo de actividades recreativas o lúdicas desean realizar los ciudadanos.

Ello, dijo, ocasionó que el mercado negro de la marihuana haya generado un clima de ingobernabilidad en el país. Por ello, el Poder Legislativo ha decido enfrentar este problema desde otra perspectiva, subrayó.

Publicar un comentario

0 Comentarios