Demetrius o la Caducidad inició temporada en el Foro Shakespeare,
donde los asistentes esperaron ansiosos el inicio este estreno con
teatro lleno este pasado viernes. Dicho espectáculo de la autoria del
dramaturgo mexicano Luis Enrique Gutiérrez Ortiz Monasterio( LEGOM )
miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte, y se encuentra bajo
la dirección de Elfye Bautista, actriz y directora de Soy lo que doy A.C.
En entrevista previa detallo : El reflejo de la cotidianeidad y la triste vida de un hombre que desde hace mucho no tiene aspiraciones ni futuro, lograron cautivar la atención del público, quienes acompañaron a este vendedor de lavadoras que algún día soñó con ser conductor del Metro, creando un vínculo de emociones, haciéndolos reír pero al mismo tiempo haciéndolos reflexionar sobre lo rutinario que se vuelve la vida para muchas personas adultas. El montaje se expone a través de
imágenes vivas, creadas a partir de las voces narradoras, sensaciones y conmociones, que nos trasladan por la vida de Demetrius y por sus circunstancias. Dichas imágenes implantan en los actores-narradores
empatía, indiferencia, e impaciencia, como los seres humanos vulnerables que son. No obstante a la ironía, la crudeza y el sarcasmo del texto, y su historia; en su lenguaje que traducido a la acción,
hace de la puesta en escena una experiencia viva, lúdica, incorrecta,
pero profundamente humana y divertida; elementos esenciales del teatro que nos permiten articular el hecho escénico. Para la directora artística, esta puesta en escena que surge por invitación de Yannin Heredia, Licenciada en Actuación por la Escuela Nacional de Arte Teatral, INBA y fundadora de la compañía Abundántia Teatro, indico : Significa “un proyecto muy divertido con excelentes actores, que por la estructura de la narración se vuelve lúdica pero no por eso deja de ser profunda”. Así las cosas, la obra se desarrolla en dos tiempos,
por un lado las voces narradoras, en un tiempo actual; y por otro, en un pasado próximo, donde se desarrolla la historia de Demetrius. Se parte de una estética semi-abstracta pero contundente, en la que el espacio escénico se genera a partir de la conjugación de elementos,
que mutan en uso y significado durante el montaje, permitiendo al espectador tener, escuchar y observar al personaje, en lo público y en lo privado; apoyándose en la iluminación y la sonorización que hace que la obra resulte en una experiencia teatral divertida y significativa para el espectador.
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