· Para realizar la concentración, los agentes económicos deberán desincorporar previamente las vacunas en las que se encontraron riesgos a la competencia.
· La concentración sin condiciones implicaría que Boehringer pierda la presión competitiva que actualmente ejerce Sanofi en los mercados de cinco vacunas para animales.
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Ciudad de México, 10 de abril de 2017.- El Pleno de la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE o Comisión) objetó la concentración entre Sanofi y Boehringer Ingelheim International en el sector de la salud animal, pues de realizarse en los términos presentados originalmente se pondría en riesgo el proceso de competencia y libre concurrencia en cinco mercados de vacunas para animales en México.
Sanofi es una sociedad que participa en la investigación, desarrollo, fabricación y venta de productos para la salud, a través de tres segmentos de negocio: farmacéutica, vacunas humanas y salud animal. En tanto que Boehringer participa en el desarrollo, fabricación, distribución y comercialización de productos farmacéuticos de prescripción, OTC (Over The Counter), bio-farmacéuticos y productos de salud animal. La concentración presentada consiste en la adquisición del negocio de salud animal que Sanofi opera en México, por parte de Boehringer, transacción que se enmarca en un movimiento internacional que celebran ambas empresas.
En esta operación, la COFECE encontró que ambas empresas coinciden en la comercialización de diversas vacunas y medicamentos indicados para aves de corral, cerdos, bovinos, caprinos y ovinos, entre otros. En lo particular se observó que la operación implicaba que en cinco mercados de vacunas, cuatro relacionados con enfermedades de las aves y uno con padecimientos de cerdos, Boehringer obtendría elevadas participaciones en el mercado y habría riesgos al proceso de competencia.
Adicionalmente, se identificó que el desarrollo de nuevas vacunas es una restricción importante para que un laboratorio crezca o se consolide en el mercado, así como una barrera a la entrada; es decir, los competidores actuales y potenciales tendrían que invertir montos considerables en el desarrollo de nuevas vacunas antes de poder competir.
En este sentido, la operación originalmente planteada por las partes tendría los siguientes efectos negativos en los cinco mercados que implican riesgos a la competencia:
a) Con la salida de Sanofi, Boehringer perdería la presión competitiva que actualmente ayuda a disciplinar sus precios.
b) Boehringer consolidaría su participación de mercado respecto al resto de sus competidores.
c) Ambas circunstancias podrían darle a la empresa la capacidad para imponer condiciones en cinco mercados, como fijar precios o restringir el abasto, sin que sus competidores pudieran contrarrestarla.
Para asegurar que habrá condiciones de competencia en los cinco mercados, el Pleno de la COFECE determinó que la operación solo se autorizaría si las empresas aceptan los siguientes compromisos:
· La desinversión (venta a un tercero) de cuatro vacunas de Boehringer y una de Sanofi, previo al cierre de la operación.
· Que el o los adquirentes de los activos mantengan la presión competitiva en estos mercados. Además, el contrato de dicha compra tendrá que incluir cláusulas que aseguren el suministro de estas vacunas a los nuevos compradores durante cierto periodo, mientras el adquirente desarrolla sus propias fuentes de fabricación.
· Previo a la desinversión, las partes deberán avisar a la Comisión el nombre del potencial comprador y proporcionarán información suficiente para que se evalúe el impacto que dicha operación podría tener en las condiciones de competencia de los mercados.
Esta resolución ha sido notificada a Boehringer y Sanofi, quienes para cerrar su transacción deberán presentar un escrito mediante el cual acepten en su totalidad las condiciones impuestas para proteger el proceso de competencia y libre concurrencia.