by Ernesto Piedras
La Reforma Constitucional en Materia de Telecomunicaciones de junio de 2013 cumple una década de empeño por una regulación eficaz que resulte en competencia efectiva, desarrollo eficiente de los mercados y óptimo aprovechamiento social de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).
En efecto, los resultantes corpus legal e institucional que tomaron forma en la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR) y en el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), dieron paso a la figura de agente económico preponderante en telecomunicaciones (AEP-T) y su regulación asimétrica, la eliminación la larga distancia y el roaming nacional, la prohibición de la discriminación tarifaria on-net y off-net, entre otras importantes disposiciones.
Adopción de Servicios. Durante la década de la #ReformaTelecom, se registra una aceleración e intensificación en la adopción y consumo de servicios de telecomunicaciones entre las personas, hogares y empresas del país, que en una importante proporción han derivado en menores precios, mayor disponibilidad, mejor calidad, basados en una ampliación de las alternativas de ofertas.
En términos de adopción, destaca el avance de la conectividad móvil y fija, al registrar un incremento de 65 y 32 puntos porcentuales (pp), respectivamente, para alcanzar un coeficiente por cada cien habitantes de 87/100 accesos por habitantes en el caso de la banda ancha móvil (BAM) y 70/100 hogares en el de la banda ancha fija (BAF), al mes de septiembre de 2022.
De manera semejante, la trayectoria de adopción de la televisión restringida alcanza 61% entre los hogares, la telefonía móvil con una elevada accesibilidad (99.4%) entre la población y la telefonía fija con una razón de 71 por cada 100 hogares del país.
Precios. Al respecto, la inflación acumulada entre junio de 2013 y mayo de 2023 asciende a 56.9%, mientras que la caída correspondiente a los precios en las telecomunicaciones mexicanas fue de -30.8%. Debe considerarse que se inició desde un nivel que en comparativos internacionales, ubicaba a México entre los países más caros del mundo y definitivamente el más caro entre sus principales socios comerciales.
Efectivamente, la elevada asimetría de tarifas de terminación de llamadas entre el AEP-T y sus competidores, así como la prohibición de la discriminación de precios entre los servicios originados dentro y fuera de las redes, vigentes desde septiembre de 2014, con la entrada en vigor de la LFTR, dieron pauta a ese ajuste tarifario de los servicios móviles y en general del conjunto de las telecomunicaciones.
¿Y La Competencia? No obstante los avances descritos, subsiste una estructura de mercado excesivamente concentrada a favor del AEP-T que obstaculiza el desarrollo de sus competidores y frena su mejor posicionamiento en el mercado, en términos de tenencia espectral, despliegue de infraestructura, evolución a nuevas tecnologías, oferta de servicios de valor agregado, entre otros.
Al mes de septiembre de 2022, su participación en usuarios sigue muy por arriba (57.2%) de la frontera que demarca la preponderancia. Después de algún margen de ganancia competitiva en los primeros años de la aplicación de la regulación asimétrica, en los años recientes no muestran suficiente efectividad esas medidas y consecuente se han congelado las ganancias en ese campo.
Más preocupante aún resulta que los ingresos del AEP-T en el mismo plazo de comparación incluso registran una trayectoria ascendente de reconcentración de mercado en los últimos dos años, con avance de 0.6 pp, para acaparar 57.5% del total de los ingresos sectoriales.
A una década de la Reforma Telecom, la gran asignatura pendiente es la consecución de la competencia efectiva. Es imperante continuar con la revisión del marco regulatorio para cumplir el mandato constitucional del IFT de eliminar las barreras a la competencia y la libre concurrencia en el sector de telecomunicaciones.