Primera parte
Por Héctor Medina Varalta
La incontinencia fecal es la incapacidad de controlar las disposiciones de forma autónoma. El paciente va a tener fuga espontánea de líquidos o un impulso incontrolable de ir al baño, básicamente esa es la definición y hay varios tipos dependiendo la causa. Las causas de incontinencia fecal pueden ser por lesiones obstétricas, sobre todo en las mujeres que han tenido partos, la edad es otro factor, pequeñas lesiones neurológicas, personas que han tenido un tipo de cirugía previa ano-rectal, esa son las principales causas. Obviamente el grupo de edad va a ser desde niños a adultos, es más frecuente en personas de mayor edad. La paciente que va a dar su testimonio después de esta entrevista, es un caso muy especial, pues ella tuvo una enfermedad previa que le ocasionó la incontinencia fecal; ella tenía un prolapso fecal, que es un factor para padecer la incontinencia fecal. A ella se le hizo la cirugía y después se le colocó esta nueva terapia que ha revolucionado el tratamiento mejor conocido como neuroestimulación sacra, es una de las terapias más actuales en el manejo de esta enfermedad.
Síntomas
Los principales síntomas son: el deseo de ir al baño y una imperiosa urgencia, ya que el paciente siente que no llega al baño, sobre todo cuando hay episodios de diarrea, esos síntomas se van a ir incrementando gradualmente, él o la paciente ya no va a poder sentir ese control que todos tenemos, es decir, si no estoy en un lugar inapropiado, me espero y voy al baño más adelante cuando esté en un lugar socialmente apropiado. En esa misma situación, el paciente inicialmente va a tener urgencia, pues no va a poder ir y empezará a manchar la ropa, va a empezar a incrementar esos signos. Lo más severo de esta enfermedad es cuando el paciente va a tener que usar una toalla sanitaria o un pañal. Esto va a afectar definitivamente la calidad de vida del paciente no sólo en el entorno social sino psicológicamente y económicamente, pues el paciente no va a tener la capacidad de laborar normalmente en un trabajo.
Diferentes manifestaciones de diarrea
Asimismo, el doctor López manifestó que la incontinencia fecal no es exclusiva del envejecimiento; hay mujeres con secuelas de un trauma obstétrico durante el parto, al principio no va a manifestar los síntomas, sin embargo, dentro de diez años van a empezar poco a poco con los síntomas porque el daño que causó el trauma obstétrico durante el parto va a generar que gradualmente vayan apareciendo los síntomas y vayan empeorando. Por otra parte, mencionó que hay otro tipo de incontinencia especial que se asocia al estreñimiento. Al principio, la paciente tiene deseo de ir al baño, no pueden evacuar bien y queda una evacuación incompleta. Hay personas que quieren ir al baño, pero realmente es el impulso que no le permite evacuar.Los síntomas son progresivos. Inicialmente a todo paciente lo tratan de una manera integral, pues esos síntomas también se presentan con diarrea. En este caso, la diarrea que provoca el Síndrome del Intestino Irritable, es sólo al evacuar el paciente va a tener el control, obviamente, las evacuaciones van a ser líquidas, porque hay un tipo específico del Síndrome del Intestino Irritable que se asocia a diarrea y, otra, al estreñimiento o uno mixto. Por consiguiente el paciente con el Síndrome del Intestino Irritable va a tener el control, sus evacuaciones van a ser líquidas y va a ir repetidamente al baño. No obstante, en el paciente con incontinencia urinaria no tiene el control. Por dicha razón, los síntomas van empeorando. Es por esto que queremos con esta campaña es que el paciente retome el control.
Factores de riesgo
La edad es un factor de riesgo, los pacientes que son sometidos a cirugía ano-rectal por múltiples causas, es decir, fístulas, abscesos anales, hemorroides son factores de riesgo; también los pacientes que están internados en hospitales psiquiátricos se ha visto que se incrementa más la incidencia, pacientes con enfermedades neurológicas, pues están en cama y no se pueden mover y las mujeres con trauma obstétrico durante el embarazo son los principales factores de riesgo. Por alguna u otra razón cuando el paciente padece la incontinencia fecal y no se atiende oportunamente, al principio pueden haber complicaciones locales, como el hecho de estar evacuando constantemente y no se tenga el control, va a irritar la región alrededor del ano por el poco control que se tiene del esfínter, la necesidad constante de usar pañal, las consecuencias psicológicas, pues el paciente va a afectar su calidad de vida,. Obviamente, a menos que haya mucha diarrea podría haber casos extremos de deshidratación. Sin embargo, es poco frecuente esta consecuencia.
Cirugía de última generación
Los cirujanos digestivos y los proctólogos son los especialistas que se encargan de manejo de los pacientes con incontinencia fecal, pero realmente se necesita de un equipo integral y multidisciplinario que aborda la enfermedad desde su causa y se hace una clase de estudio para determinar cuál es el mejor manejo del paciente. Además, una vez realizadas todas las pruebas, es decir, evaluar el colon, el recto, los músculos anales, los músculos del piso pélvico y de acuerdo a la severidad del caso, el paciente puede iniciar el tratamiento: que tenga una dieta rica en fibra, terapia física o rehabilitación, terapia física o rehabilitación, es decir, ejercitar el esfínter anal para fortalecer los músculos del piso pélvico y la cirugía de última generación. Es la terapia que más ha dado los mejores resultados. Después de una cirugía de una implantación de un neomodulador sacro, prácticamente el paciente recupera su vida normal, es decir, si la terapia que se colocó o implantó el neomodulador sacro funcionó, el paciente puede recuperar más de un 80 por ciento su función y va a comer prácticamente de todo, siempre y cuando el doctor López y su equipo de profesionales de la salud le proporcionen al paciente una dieta saludable. Esa es la idea y es la finalidad de recuperar esa calidad de vida.