Por Héctor Medina Varalta
El quinto cristal es un thriller psicótico mezclado con una amalgama de emociones, la mayor de ellas es la ansiedad, que en nuestra época estamos viviendo muchos de nosotros, pues algunas personas tienen tabúes, prejuicios, casi nadie se atreve a hablar de los problemas mentales hasta que alguien se atreve a hablar de ellos. Una vez que alguien levanta la voz y dice: “yo soy anoréxica”, hay otras voces que le dicen: “soy bulímica”, “yo me cortó la piel.” Esta novela habla de todo esto. El personaje central se llama Dolores, una mujer que de niña tuvo un trauma tan severo que su mente no lo pudo digerir y lo bloqueó, generando estos espacios en blanco. Estos espacios en blanco van llenándose con cosas irreales. Dolores crece con una percepción alterada de la realidad, cada vez más alterada, hasta que es internada en un hospital psiquiátrico y la ayudan a regresar al inicio del origen de sus miedos y cómo se generan sus angustias y fobias.
Fobias
Es preciso llegar a ese punto para poder ayudarla a sobrevivir y a reintegrarse en la sociedad. Dolores padece una psicosis, pues se ha reinventado una historia de vida irreal. Récamier asegura que, en ocasiones, regresar al origen de nuestros temores e inseguridades, es una ayuda inmensa para poder controlar la fobia hacia un animal, fobia a manejar, fobia a las alturas; la fobia a los perros, es una de las más severas, pues el solo hecho de salir a la calle y tener la sensación de que te van a olfatear, te produce miedo. Otra de las fobias que afectan mucho, es la fobia a las alturas, pues uno siente, de alguna manera, que la altura nos jala.
Miedo al miedo
Hablar del miedo debería de ser algo normal y cotidiano, sobre todo, ahora que muchos de nosotros vivimos con miedo e inseguridad. He descubierto que el peor miedo que existe es tenerle miedo al miedo, es una emoción que no podemos controlar. Y ese miedo nos empuja a un estado de angustia muy perturbador. No obstante, existen personas que aseguran, que hay miedos que, en cierto modo, son buenos. Está la adrenalina, que es como un sexto sentido, que nos avisa cuando nos encontramos en una situación de peligro. Tenemos otro miedo que nos dice: “paralízate” y no podemos mover el cuerpo. Entonces, ¿qué tan bueno es el miedo? Per se. Por supuesto, hay que tener los instintos, la adrenalina, el sexto sentido y demás, pero considero que los miedos nos detienen para hacer muchas cosas en la vida-aseveró Récamier.
Murallas y cárceles mentales
En la portada de El quinto cristal se encuentran varias mujeres cubriéndose el rostro con las manos, menos una. Al preguntarle a la escritora el porqué de ello, refirió que, la novela empieza cuando Dolores está recordando su infancia y adolescencia, viviendo en una casa con otros cuatro niños huérfanos. Evidentemente, en la novela, la protagonista principal no recuerda ni quiere recordar; se ha construido murallas y cárceles mentales. De esta forma, la portada representa a la protagonista despierta cuando puede enfrentarse a todo lo que vivió de niña, descubriendo todo lo que ella ha alterado y cuál es la realidad.
También escribe cuento infantil
Soy una mujer muy afortunada. Me siento muy contenta, en particular, este día, pues hay muchísimos autores mexicanos que, por alguna razón u otra han podido publicar y que tienen trabajos muy buenos. Yo tuve la fortuna que me leyera un editor, además me pidió un cuento que lo adaptara para niños, y de ahí me empecé a abrir varias puertas. Escribí un cuento titulado “Ehecatl, dios del viento” que lo publicó la extinta CONACULTA; en la SEP me publicaron El Cucarachero, un personaje bellísimo. He publicado muchos cuentos infantiles y he publicado mucho cuento para adulto en diferentes antologías, tanto en la Editorial Endira, Editorial Velma, artículos para revistas digitales. Mi primera novela “Entre mundos” se presentó también en la FIL del 2013 y “El quinto cristal” está teniendo muy buena respuesta del público.
Una agradable experiencia
Los lectores están empatizando, se están acercando a los personajes, están sintiéndolos. Muchos lectores sufren en su novela. Eso me encanta; y los demás lectores que no se identifican, se acercan y me dicen que ha de ser muy fuerte vivir con un trastorno de ansiedad. Cuando presenté mi primera novela me dije: “ya me puedo morir”. Ahora pienso todo lo contrario, pues pienso seguir escribiendo y creando personajes. Por otra parte, tengo muchos lectores que me siguen y escriben. Cuando presenté “El quinto cristal” lancé una convocatoria en las redes sociales, sin decir dónde la iba a presentar, les pedí que me escribieran los que quisieran asistir. Para esto, tenía mis hojas con las anotaciones con dos personas: Doctor Frío y Quico siete, seguidores que nunca había visto. Además llegaron 200 personas cuando el salón tenía capacidad para 80 personas. Necesité contratar a dos jovencitas para que me ay7udaran a manejar a la gente. Vendí libros y firmé autógrafos toda la tarde. Cuando salí a la terraza había mesas con “tuiteros” presentándose entre ellos. Fue tan hermosa experiencia, pues de esas 200 personas, conocía a 15 o 20 personas y ponerle cara a quienes me siguen y escriben y poder dedicarles unos minutos. Eso fue maravilloso. Yo espero que mis seguidores que están en Guadalajara asistan mañana a la presentación del libro-subrayó la autora.
Problemática genética
Inés Récamier confiesa que ha sentido todas las emociones que plasmó en su libro, pues considera que, como escritora, no puede meterse con una emoción que no ha conocido. Por dicha razón, Dolores, la protagonista principal, percibe todas las emociones que padece a lo largo de la trama, pero que, de alguna manera, las pudo evitar o entender. Además, Dolores tiene en su familia personas que padecen este tipo de problemas. Las o los lectores que no se identifica con la problemática de Dolores, son personas muy equilibradas y demasiado analíticas, pero se llega a interesar por la historia y ver cómo se desenvuelven los misterios.
Que lean sus obras, eso es más que suficiente
El libro Entre mundos trata el caso de El nido vacío, es decir, una mujer que llega a esa etapa de la vida, su marido tiene su carrera, sus hijos vuelan. Esta mujer está educada, como muchas más, a casarse, tener hijos y cuidarlos. Entonces, al llegar el nido vacío, lo que hace es meterse de lleno a jugar con su hijo adolescente en un juego virtual. Precisamente, por este nido vacío, el juego la atrapa. Por consiguiente, se da cuenta que en ese juego, los personajes virtuales son de 50 o 60 años de edad y empieza a crear una comunidad y a reinventarse y descubre lo que es volver a vivir una primera vez; de todas esas primeras veces que vivió que ya no existen: otro primer novio, otro primer beso, otras primeras flores. Además, está viviendo su vida real, pero se entrega de lleno al mundo virtual y este empieza a convertirse en su eje. Es una historia que en la actualidad también vivimos. Entre mundos, es una novela que aún sigue vendiéndose cuando ya tiene cinco años de haberse publicado, la siguen pidiendo, la siguen vendiendo; se puede encontrar en versión digital y hasta está pirateada, sin embargo, a nuestra entrevistada eso no le importa, lo que le interesa es que la lean, tenga lectores que le guste lo que ella escribe o que no le guste, pero que la lean, con eso es más que suficiente.