Educación para la paz a través de la Universidad Metropolitana de Jalisco

Tercera parte

Por Héctor Medina Varalta

 

¿Y si durmieras? ¿Y si en tu sueño, soñaras?

¿Y si al soñar fueras al cielo y allí recogieras

una extraña y hermosa flor?

¿Y si cuando despertaras tuvieras

la flor en tu mano?

SamueL Taylor Coleridge-

 

Guadalajara, Jalisco, septiembre de 2022. Contestando una pregunta a uno de los medios de comunicación acerca de los niños que ven películas para adultos de narcos y cómo influyen en sus mentes, pues es muy común escuchar hoy en día, a algunos niños que de grandes quieren ser narcos. Una respuestas se trata de los ejes que se van a utilizar mucho en la Preparatoria de la Paz, es el manejo de las emociones. En el manejo de las emociones, lo que se busca es que el estudiante se conozca y al conocerse pueda encontrar el origen de su propio conflicto, que todos lo tenemos, trabajarlo de una mejor manera para encontrar la paz interior. Con esto, obviamente podrá ir identificando la consciencia de su propio ser, de su autocuidado, fortalecer su autoestima para generar personas a las que se les pueda ver distintas a las que actualmente se les está mirando.

 

Cambiar el patrón de conducta

   Este tipo de admiración a este arquetipo de personajes mucho viene de que crecen solos y lo que buscan es tener poder, atención, identidad. Si les damos esto sin usar estas figuras-los narcos-, nuestra pretensión es que cuenten su propia identidad y puedan salvaguardarse a sí mismos, por lo menos de crear una autoconsciencia de autocuidado para evitar lo más posible este tipo de violencias. Por supuesto, no la podemos erradicar la violencia por completo, pero al menos, que el alumno pueda reconocer el camino que lo puede llevar a ese tipo de situaciones y evitarlo lo más posible. Por esta razón es tan importante la Cultura de Paz, ya que es la mejor herramienta con la que mejor se puede trabajar, pero si no la conocemos no la vamos a practicar y si no la practicamos no vamos a poder generar otros contenidos de discursos en los jóvenes; es muy importante que estos jóvenes vaya acompañados de los mayores.

 

La Cultura de Paz es científica

   Varios empresarios en Santa Tere que a los 12 años iban a trabajar a los negocios, pues no tuvieron la oportunidad de curar la preparatoria, pues para los papás era más prioritario que sus hijos trabajaran en el negocio familiar. Es un contexto de realidad en la zona metropolitana, Jalisco y la Cuidad de México. “Este es un segmento un poco olvidado-mencionó la maestra Mónica- porque no veo a ciertas personas que van a la universidad. Conozco a mujeres que están al cuidado de sus nietos, sin embargo, el sábado es muy acogedor con una taza de café pueden estudiar la preparatoria. Por otra parte, tenemos convenios como el Instituto de Justicia Alternativa. No vamos a estar solas. La Cultura de Paz es científica. Tenemos una alianza con grandes personalidades, por ejemplo, la doctora Clarisa, es una experta en el tema de la mediación y está dentro de la plantilla académica de este proyecto”.

 

 

 

Tener una propia ideología

La cultura de Paz es una manera de actuar, pensar y decir las cosas respetando los derechos humanos y los Tratados Internacionales: una nueva forma de diálogo, de empatía con las personas que nos rodean. De hecho, hay siete principios muy importantes a señalado la UNESCO: cómo me tengo que relacionar, tengo que relacionar con los demás, respetar, enseñarse a escuchar, una comunicación más asertiva, una escucha activa, convivir y participar, sin herir los valores de quien uno está conviviendo. La Cultura de la Paz es una nueva forma de actuar, pensar y decir las cosas. De hecho, tienen tres círculos de lo que esto significa y cuando se logra eso, vamos a lograr que nuestros jóvenes obviamente ya no quieran ser los narcos o las novias de los narcos, en el caso de las jóvenes, porque van a tener su propia ideología.

 

Las becas

   Para motivar a quienes les falta terminar la preparatoria, se estarán dando becas a las y los estudiantes que las soliciten, tendrán que seguir ciertos protocolos: quien recomienda a la o el estudiante, se hace un estudio socioeconómico y obviamente la carta compromiso para que se comprometan en terminar sus estudios. Siempre se pide esa carta compromiso con los becados para que sí se comprometan, pues, en ocasiones las becas son incitadas por alguien más que desea el bienestar de esa persona y no realmente del interesado. Al hacer ese compromiso es darle seriedad y que el estudiante se comprometa realmente a cumplir sus estudios.   También se habló de la necesidad de impartir clases de creatividad o de aprender a pensar correctamente, clase que algunos políticos no desean que esto pase, pues podrían despertar al coloso que llevamos dentro. Para esto, se tiene que trabajar muy duro, pues ya es muy común observar en la calle, en el transporte público, en el parque, incluso en los propios hogares, a personas usando el celular, en vez de conversar o leer un buen libro. Hay que recordar a personajes célebres que llegaron a cumplir sus sueños porque supieron pensar correctamente      

 

El analfabeta del futuro

Tal vez en estos momentos, en algún cobertizo de carbón o en la soledad de su habitación, un niño está desarmando una televisión con la finalidad de adaptar en su interior una novedad; ese niño puede ser otro González Camarena. En otro lugar, un muchacho se encuentra componiendo una canción; él puede convertirse en un Armando Manzanero. Y, en alguna otra parte, una adolescente se refugia en la silenciosa biblioteca de su escuela, para plasmar en una novela romántica, la inolvidable experiencia de su primer beso de amor; ella puede ser una Corín Tellado o una Vargas Dulché. Pero si no hay ninguna motivación de parte de los progenitores, esos sueños pueden ser olvidados. De seguro, la tecnología actual se encargará de ello. Por otra parte, en la madrugada del 4 de junio de 1896, en Detroit Michigan, un ruido ensordecedor despierta a los habitantes de la avenida Bagley. De súbito, el cobertizo de carbón donde proviene el alboroto se viene abajo y por el boquete sale un vehículo con cuatro neumáticos de bicicleta, un timbre en lugar de bocina y una caña por timón en lugar de volante. Los desvelados vecinos que despertaron por el alboroto acaban de ser testigos del nacimiento del primer automóvil construido por Henry Ford.

 

 

Un reto a la grandeza humana

   En 1883, en otra ciudad, un hombre soñaba inventar una lámpara incandescente. Antes de llevar a cabo su anhelo, se dice que ese hombre lo intentó 10 mil veces. Una y otra vez, a pesar de tantos fracasos, no dejó de ver con los ojos de la mente su creación hecha realidad. El pequeño laboratorio, humeado de los vanos intentos, era testigo de aquella obsesiva entrega. Gracias a Tomás Alba Edison, hoy podemos gozar de la tecnología actual.

En otro país, muchos años atrás, en la soledad de su habitación, un hombre que padecía sordera se esmeraba en componer una sinfonía. Con los oídos de su alma escuchaba las más bellas vibraciones, que plasmaba en papel pautado. El día del estreno, al terminar de dirigir la orquesta el público lo ovacionó, pero como estaba de espalda y debido a su sordera, Beethoven sólo se dio cuenta cuando un hombre con lágrimas de emoción se acercó a él, invitándole a ponerse de pie. En la actualidad, la UMJ pretenden desarrollar los talentos en sus estudiantes para transformarlos un Edison, un Beethoven, un Shakespeare, un Ford o en un Antonio Camarena. No, no es un una utopía, sino un reto a la grandeza humana.