INTELIGENCIA DE NEGOCIOS, FACTOR DIFERENCIADOR EN LAS EMPRESAS.

Académicos mexicanos comparten mejores prácticas y aplicación del Business Intelligence con una visión de impacto positivo a la comunidad.

 

Bajo un enfoque de inteligencia de negocios o Business Intelligence, utilizar el análisis de datos para la toma de decisiones al interior de una empresa, es un elemento diferenciador que influye en el clima organizacional, y en el desenvolvimiento como parte de su comunidad.

 

Así lo indicaron la Dra. Michelle Lazcano y el Dr. Armando Reyna Ballesteros, integrantes del claustro docente de la Licenciatura en Inteligencia de Negocios e Innovación de CETYS Universidad Campus Mexicali, durante el evento internacional Foro Abierto de Ciencias Latinoamérica y Caribe CILAC 2021, auspiciado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) basado en los 17 Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) que propone la Organización de las Naciones Unidas (ONU). 

 

CILAC es un movimiento permanente que propicia el diálogo y la cooperación entre actores, el intercambio de experiencias, la definición de estrategias y el seguimiento de acciones a nivel regional en el campo de la ciencia, la tecnología y la innovación.

Los docentes dictaron un taller virtual sobre las mejores prácticas y aplicaciones de la inteligencia de negocios para un público integrado por asistentes de los cinco continentes, como un ejercicio de internacionalización del conocimiento e intercambio de ideas.

 

Desde esa perspectiva, el Dr. Reyna Ballesteros definió como Business Intelligence a la habilidad para transformar los datos en información y ésta en conocimiento, de forma que se pueda optimizar el proceso de toma de decisiones en los negocios. 

 

La Dra. Michelle Lazcano dijo que la diferencia para un negocio al aplicar dicha metodología en su planeación estratégica, consiste en que hacerlo le permite detectar las necesidades reales de mejora en la empresa, lo cual se convierte en una ventaja competitiva al saber exactamente cómo proceder con los métodos, procesos y argumentos que se utilizarán para obtener respuestas o resultados favorables.

 

Ambos académicos refirieron que las buenas prácticas de la Inteligencia de Negocios se presentan a través de dinámicas efectivas y verificadas para llevar a cabo los procesos. Las principales características que permiten identificarlas son la facilidad para optimizar el tiempo, ahorrar recursos económicos y humanos, entre otros. 

 

Cuando se tienen valores monitoreados y parámetros de comportamiento, es posible realizar un análisis general de la empresa a través de numeralia, y efectuar previsiones que den oportunidad de sobrellevar diferentes contingencias que pudieran impactarla a corto o mediano plazo. 

 

Es importante considerar la incorporación de este tipo de disciplinas y metodologías en los planes de negocio y operativos de las empresas, así como en sus actividades cotidianas y adoptarlo como cultura organizacional, ya que el correcto uso del Business Intelligence es una ventaja competitiva, concluyeron.