Segunda parte
By Héctor Medina Varalta
Guadalajara, México, diciembre de 2016. A propósito, cuando María estaba estudiando ilustración en España, cierto día fue a comprar un boleto en el aeropuerto y les dijo que quería un boleto redondo y les pareció la expresión más romántica del mundo, pues se imaginaban un boleto redondo, para nosotros es clarísimo, pero para ellos era fantástico de que fuera redondo. Al respecto, Mónica Lavín describe en el libro, el síndrome de Asperger, en el que no se puede comprender el sentido figurado, no hay capacidad en el cerebro para entender estas metáforas. Se supone que hay niveles, hay unos que son muy fríos, ya que no entienden el sentido del humor. El lenguaje es el vehículo para construir las historias y para muchas otras cosas más, pero en el caso del libro es explorar las posibilidades de nuestro español. No es un texto de redacción, no es un libro de punto y coma, no es nada de eso. Por ejemplo, al utilizar en el libro un fragmento de Don Quijote de la Mancha, pero para describirse uno mismo o al personaje que se pretende describir; el Quijote es divertido.
Al ir escribiendo íbamos descubriendo qué materiales teníamos que utilizar, usar heterónimos, jugar a las cuatro personas. Nos parece que el libro tiene un espíritu lúdico, pero que lo aterrice y hace sentir que lo literario es algo cercano que está en nuestra cotianidad y que se puede disfrutar, porque en México se disfruta poco de la lectura y del acervo.
Proyecto
Mónica Lavín es una de las escritoras más famosas y más leídas en SÉLECTOR. Ella escribió hace muchísimos años en esta editorial, la novela Tonada de un viejo amor. Después pasó al Grupo Random House con esa novela. Pero en la primera editorial siempre ha escrito libros para jóvenes como Atrapados en la escuela. Yo confío mucho en ellos en la capacidad de acercarse al lector correcto. Aunque yo creo que este libro es para doce años al infinito: maestros, estudiantes, jóvenes, personas solitarias, círculos de lectura, como libro de texto.
Ojalá y los maestros que siempre están buscando material encuentren en él un apoyo. El libro está muy bien diseñado y muy bien estructurado.
Mónica Lavín y María Perujo Lavín tienen pensado presentar en la próxima Feria Internacional del Libro (FIL), un texto con cuentos para jóvenes. No es muy seguro, pero César Gutiérrez y Daniel Araico y Mónica tienen una relación muy cercana y renovada con Es puro cuento, yo creo que haremos algo bueno. Por su parte, María mencionó que estudió diseño gráfico y tiene una maestría en libro ilustrado infantil. Mi idea es escribir literatura infantil, voy a enviar un trabajo a un concurso, ojalá y se edite. Me gusta todo: diseño, ilustración, letras, todo. Entonces, de repente tengo que enfocarme en cada cosa para hacerlo bien. Me encanta lo manual. Me encanta hacer.
Escribir es un arte de resistencia
Lavín mencionó: ya que la idea de este libro es que sea cuaderno. Me parece que en este tiempo en que nos dedicamos a usar la computadora y toda la tecnología, aquí es volver a sentir una relación muy personal, porque viene a relación de usar la pluma, es estar en contacto con uno mismo. Digamos, tiene esta posibilidad de ser un objeto íntimo, pero al mismo tiempo socializado, pues además de compartir cómo te quedó tu cuento, comparar con alguien más que lo esté haciendo, estás dialogando con los autores y sus propuestas. Yo considero que tiene este efecto que deseamos de todos los libros, sean cuadernos de escritura o libros, que lo atesores. Es como un diario; tienes intimidad y tiene esta otra posibilidad que es lo que queremos los escritores: que alguien más se conecte, lea aquella historia que vamos a escribir. La idea es que cuando acaben este cuaderno tengan un cuento completo. Empiezan con una línea, pero al final están todas las páginas para escribir el cuento. Si no cabe todo el cuento, tomen otra hoja. Y hay un apéndice con una propuesta de lecturas para complementar ciertos aspectos del cuaderno. Otras de las propuestas, es que los lectores hagan un cuento colectivo. Es un libro muy libre y versátil. Es una gran oportunidad que nos brindó SÉLECTOR al permitirnos explorar un libro juntas. Fue un enorme gozo para mí: unir nuestras profesiones en lo que más nos gusta y trabajar juntas para lograr algo hermoso.
Lavín exhorta a las personas que tienen la inquietud de escribir y por alguna razón no se animan a hacerlo, si uno quiere llegar a un buen puerto, es decir, a que alguien lea tus cuentos y les produzcan alguna emoción, uno tiene que estar dispuesto a la batalla, a nadar a brazo partido. Nadie dijo que el camino era nada más dar tres pasos y llegar, pero hay que darlos y tener, sobre todo, la pasión y la confianza en uno, aceptando la crítica, pero no bajar los brazos. Dicen que escribir es un arte de resistencia y hay que necear, pues si quieres escribir, tienes que leer y escribir. Por su parte, Perujo Lavín comentó que, estas dos áreas son de darte de topes hasta que lo haces bien; siempre va a haber alguien a quien le guste y a quien no le guste lo que hagas. El chiste es enfocarte bien en las cosas que tú creas, pero siempre va a haber críticas malas y buenas, y hay que aprovecharlas para seguir tu camino y hacer lo mejor que tú puedas.
Trayectoria profesional
Mónica Lavín es autora de libros de cuentos: Nicolasa y los encajes; Uno no sabe; Pasarse de la raya; Manual para enamorarse. También escribe novelas como: Café cortado, que ganó el Premio Narrativa de Colima para obra publicada o el libro de cuentos, Y no ha muerto, que ganó el Premio Nacional de Literatura Gilberto Owen y la novela que tuvo muy buena recepción de parte de los lectores, Yo, la peor, sobre Sor Juana Inés de la Cruz, esta novela le dio el Premio Iberoamericano de novela Elena Poniatowska que otorga el gobierno de la Ciudad de México en 2010. Asimismo, ha escrito las novelas Las rebeldes; Doble filo; Hotel limbo; aproximadamente diez libros de cuentos y diez novelas, un libro de pequeños ensayos que les ha guastado mucho a los maestros, cuyo título es: Leo, luego escribo, son reflexiones. Es decir, Es puro cuento, deriva de esa inquietud donde Lavín quería acercar ciertos cuentos clásicos de la literatura para animar a los jóvenes al placer de la lectura, más el gozo de la escritura. Actualmente, tiene la columna Dorar la píldora, en El Universal y el programa Contraseñas, en el Canal 22 que acaban de estrenar con la escritora Rosa Beltrán.
María Perujo Lavín es diseñadora gráfica del Instituto Iberoamericano, maestra en libro ilustrado y animación audiovisual para niños en la Universidad de Vigo, España. Esta es su primera publicación. Tiene muchos proyectos y está llegando, paso a paso a lo que quiere.
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